ACERCAR EL PATRIMONIO. CORELLA
26 de agosto 2010
Recorrido por la arquitectura y las artes en Corella en los siglos XIX y XX
D. Javier Azanza López. Cátedra de Patrimonio y Arte Navarro
Pese al marcado carácter barroco de las artes plásticas en Corella, también las manifestaciones artísticas de los siglos XIX y XX han dejado su huella en la ciudad.
Una acuarela realizada por el ingeniero de Diputación Aniceto Lagarde a mediados del siglo XIX muestra una vista de la ciudad, en la que su arquitectura se pliega a la tradición, como queda patente en su plaza de toros (1845-47), en las Bodegas de Camilo Castilla (1856), decoradas con cerámica vidriada procedente de la fábrica sevillana de Manuel Ramos Rejano, o en las torres de San Miguel (1898-1900), que conforme al proyecto de Elías Ballespín tratan de armonizar con el lenguaje barroco del templo. Pero a su vez, Corella se suma tímidamente a la modernidad de los nuevos materiales con la construcción del puente de hierro sobre el río Alhama (1900), sustituido en 1963 por una nueva infraestructura proyectada por Eduardo Torroja.
En el siglo XX resulta fundamental para Corella la figura de José Luis Arrese, a quien el Ayuntamiento mostró su gratitud erigiendo en 1951 un busto en bronce realizado por el escultor valenciano Ignacio Pinazo Martínez. La labor de Arrese en el terreno de las artes plásticas resulta de gran interés por dos motivos. El primero de ellos, por los artistas que trajo a Corella para llevar a cabo diversas obras, la mayoría relacionadas con la remodelación de San Miguel; es el caso de los pintores Ceferino Cabañas y Jacinto Alcántara, y del escultor Antonio Arenas. Al arquitecto y político bilbaíno obedece también la presencia en Corella del singular pintor Antonio Fernández Soler, especializado en retratos y bodegones que ejecuta con una técnica impresionista, y que decoró asimismo la cúpula del Convento de Araceli con escenas religiosas. El segundo, por la creación en 1950 de la Escuela de Artes Aplicadas y Oficios Artísticos de Corella, en la que impartieron docencia artistas como Antonio vaquero, José María Ascunce, Antonio Sanz Gallego y Rafael Huerta. Fiel a su vocación de paisajista, Ascunce realizó una excepcional vista de Corella, de estructura sólida y colorido austero, a la que dota de un vigor muy personal. Rafael Huerta dejó su huella en esculturas como el Sagrado Corazón del Colegio de Pasionistas, o el monumento a Margarita de L’Aigle, que remite a la historia misma del lugar en el siglo XII. Por las aulas de la Escuela de Artes y Oficios han pasado numerosos artistas, entre ellos Ignacio Guelbenzu, Nuria Martínez, Beatriz Alvero “Pía” o Jesús Pérez Marín “Bóregan”, autor del Monumento a la Paz (1990) y del Homenaje a la Vendimia (2010).
José María Ascunce. Vista de Corella
Boregan. Homenaje a la vendimia
Ya desde mediados del siglo XX y hasta la actualidad son numerosos los artistas que por un motivo u otro parecen vinculados a Corella. Es el caso de Pedro Lozano de Sotés y Francis Bartolozzi, que llevaron a cabo la decoración mural de la Casa-Cuna (1954), con su alegre factura infantil. De pintores como Jesús-Erich Degner Piquer (Hamburgo, 1940-Madrid, 1979), alemán de familia corellana que siente cercana la influencia de sus maestros Benjamín Palencia y Daniel Vázquez Díaz en sus paisajes corellanos de gran intensidad cromática, o en sus retratos de indudable captación psicológica; Ana Mari Marín, con una acuarela de cuidada y gozosa gama cromática; o Jesús Lasterra, quien a través de sus grabados nos acerca a la Semana Santa corellana. También la escultura urbana hace acto de presencia en sus calles, con el homenaje de José Antonio Eslava a Alonso López de Corella (2000), que condensa admirablemente los valores del arte y humanismo renacentistas; o con la gran hoja de vid (2008) con la que Juajo Novella levanta una transparente torre-atalaya. Y a medio camino entre arquitectura y escultura se encuentra el conjunto de Manuel Contreras en recuerdo del desaparecido convento de la Merced. Precisamente la arquitectura adquiere entidad en este período, con realizaciones que van desde la construcción de la Casa Sindical (José Luis Arrese, actual Centro de Creación Joven) y el Colegio-Noviciado de los Pasionistas en las décadas de 1950-60, a los proyectos más recientes diseñados por arquitectos como el Polideportivo Miguel Induráin (1991), la Fundación María Díaz del Villar (1995, Juan Irigaray y Luciano Torres), o la Ciudad Deportiva de Corella (Antonio Vaillo y Juan Luis Irigaray).
Jesús-Erich Degner Piquer. Vista de Corella
Ana María Marín. Vista de Corella
PROGRAMA
Martes, 24 de agosto
Hitos en la Historia de Corella
D. Esteban Orta Rubio. Sociedad de Estudios Históricos de Navarra
Escritores y publicistas de la Corella del Barroco
D. Javier Itúrbide Díaz. Uned de Tudela
Corella en la cultura y el arte del Barroco
D. Ricardo Fernández Gracia. Cátedra de Patrimonio y Arte Navarro
Miércoles, 25 de agosto
La Corella oculta. Tras las celosías de las clausuras de la ciudad
D. Ricardo Fernández Gracia. Cátedra de Patrimonio y Arte Navarro
Las artes suntuarias: al servicio del esplendor del Culto y la Liturgia
D. Ignacio Miguéliz Valcarlos. Cátedra de Patrimonio y Arte Navarro
El calendario festivo
D. Francisco J. Alfaro Pérez. Universidad de Zaragoza
Visita a la iglesia de San Miguel
Visita a los túneles
Jueves, 26 de agosto
Recorrido por la arquitectura y las artes en Corella en los siglos XIX y XX
D. José Javier Azanza López. Cátedra de Patrimonio y Arte Navarro
La imagen del Rosario y San Miguel en las artes
Dña. Mª Gabriela Torres Olleta. GRISO. Universidad de Navarra
Corella, ciudad conventual y palacial: visita guiada
Dña. Pilar Andueza Unanua. Cátedra de Patrimonio y Arte Navarro
Clausura