El retablo mayor

De estilo rococó, el retablo es obra señera del maestro calagurritano Diego de Camporredondo quien el 24 de junio de 1759 se hizo cargo del proyecto comprometiéndose a finalizarlo en un plazo de tres años por 4.600 pesos flojos. Este retablo, de gran altura, tiene forma de exedra semicircular adaptándose a la cabecera renacentista de la iglesia. Se organiza en sotabanco, media caña y banco con cuatro grandes ménsulas en las que apean cuatro columnas de orden gigante y capitel compuesto que dividen el cuerpo principal en tres calles. Sobre las cuatro columnas discurre una cornisa volada. Remata el conjunto un gran cascarón. Del retablo cabe mencionar el rico sagrario-expositor que forma un auténtico retablo dentro de esta maquinaria barroca. Sobre el expositor, que acoge la imagen medieval de la Virgen de la Blanca, se sitúa un templete con la efigie de Santa Bárbara, copatrona de la localidad. A ambos lados del sagrario-expositor destacan dos templetes laterales otrora acompañados por sendas credencias. En la calle central destaca la imagen de la Asunción flanqueada por las imágenes de San Pedro y San Pablo en las calles laterales. Finalmente, el ático se emplaza el Calvario. Este retablo sobresale por la potencia y protagonismo de la arquitectura y por la delicada ornamentación rococó extraída en gran parte de grabados del momento.