Monumento a San Francisco Javier

• Autor: Faustino Aizkorbe.

• Materiales y técnica: Acero con pátina verdosa.

• Medidas: Imagen: 530 cm; Pedestal: 172 x 151 x 151 cm.

• Ubicación: Parque de Yamaguchi.

• Fecha de instalación: 4 de agosto de 2006 (inauguración).

En el año 2006, el Ayuntamiento de Pamplona se sumó a los actos conmemorativos del V Centenario del nacimiento de San Francisco Javier (Javier, 1506-Sancián, 1552) con una escultura que reflejase su labor misionera universal. El encargo recayó en el escultor navarro Faustino Aizkorbe, autor de diversas esculturas del santo en Yamaguchi (Japón), Sancián (China), Goa (India) y en su propia localidad natal. En todas ellas se aleja de la imagen tradicional para aportar una visión personal y a la vez contemporánea, no exenta de espiritualidad que plasma a través de la pureza de líneas del conjunto.

La escultura de San Francisco Javier, fundida en bronce y recubierta de una pátina verde, se eleva sobre un pedestal cúbico. Pese al aparente carácter no figurativo, es posible descubrir en la imagen una de las iconografías más características del Apóstol de las Indias, como es la del santo extático, con la mirada elevada hacia lo alto y abriéndose la sotana a la altura del torso para mostrar su corazón inflamado de amor divino, como reflejo de las grandes avenidas de consolación con que Dios premiaba sus trabajos. La claridad de sus formas, de seguros perfiles y pulimentadas superficies, confieren a la obra una personalidad propia. Sobriedad compositiva, belleza y elegancia del diseño, y perfección formal en el tratamiento del material constituyen las notas dominantes de una escultura a la que por otra parte no resultan ajenas sus investigaciones en torno al vacío y al descubrimiento del espacio interior.